TESTIMONIOS
PAOLA P.
El acompañamiento fue la oportunidad de un nuevo amanecer para que yo pueda nuevamente florecer.
Lo que mi experiencia de psicoterapia ha aportado a mi vida:
1. Me ha ayudado a crear un hábito de gratitud porque ahora me centro en pequeños detalles que me conectan con la vida plena.
2. Me ha servido para sentirme satisfecha y orgullosa de lograr aquello que es realmente importante, que está a mí alcance y me genera bienestar.
3. Y, por último, me ha llevado a contemplar mi propia transformación interna. Sentir paz y libertad para verme desde dentro y vivir con alegría y generosidad hacia afuera.
CECIBEL V.
Lo que más admiro de las personas es cuando son ellas mismas porque son libres… Desde mis doce años buscaba sentirme así... Mi nombre es Cecibel Valarezo y a los 23 años tuve el regalo de conocer a Cristina Anda, una persona de mucha paz que supo guiarme para poder encontrarme y a la vez liberarme. Fueron cuatros meses en los que sentí que llegó el tiempo de Dios y el momento de sanar. Por medio de una pantalla (hicimos la terapia virtual) era increíble como Cristina supo conectarse conmigo, entenderme, respetar mi proceso, sin juzgarme. Su manera de manejar cada sesión fue muy asertiva y cuando, en lo personal, le echas ganas y te enfocas, logras cosas estupendas! Hoy soy una mujer segura, libre, amada y respetada por mí. Eternamente agradecida por el proceso compartido, porque con su apoyo logré soltar y perdonar lo que por más de 10 años me tenía encarcelada. Mi vida tiene color, tiene aire, tiene sentido. Gracias infinitamente gracias por ayudarme a encontrar en mi interior toda la fuerza para enfrentar mis heridas pasadas, presentes y futuras.
CAROLINA H.
Cuando empecé el proceso pensé que me llevaría al mismo fracaso que había tenido en otras terapias, pero esta vez fue diferente. Cristina me inspiró mucha confianza desde la primera sesión y poco a poco me ayudó a reconocer lo que me frenaba, molestaba y dolía. Las ‘tareas’ fueron un complemento súper bueno para poder integrar lo que me daba cuenta en las sesiones y no se quedara solo en mi mente. Me siento agradecida por la experiencia, siento que mi vida ha cobrado un mayor significado.
FRANCISCO S.
Para mi la psicoterapia fue aprender a mirarme sin juicios, a dar un paso a la vez enfocándome en el presente, a soltar el miedo de ser vulnerable y a sentirme más conectado con quien realmente soy. Ahora soy más consciente y coherente con mis relaciones, empezando por mi mismo.
EVELYN B.
Llegué sin rumbo, con incertidumbre, sin ánimos, sin identidad.
Lo que más me ha ayudado es aprender a sentir y a poner límites. He aprendido a darme prioridad, porque necesito estar bien para dar lo mejor. Me siento más segura. Logro conectar con las otras personas a través de una mejor comunicación.
Estoy muy agradecida porque me ha ayudado mucho, especialmente a conocerme mejor…
Las dificultades son cosas que nos enseñan a vivir; si aprendemos crecemos y si no aprendemos se nos repite.
JAIME B.
Ir a psicoterapia me ayudó a reconocer que lo único que puedo hacer en mi vida por mi mismo, es hacerme responsable de mis decisiones y resultados.
DIANA A.
Aprendí a conectar con mi respiración y con mi cuerpo. Me ayudó a estar más tranquila para no desesperarme cuando las cosas se ponen difíciles y para disfrutar más de las cosas pequeñas. Siento que hoy soy más agradecida a pesar de que mi vida no sea como siempre he deseado, porque valoro más estar bien conmigo misma.
SARA O.
Al principio me daba vergüenza decir que tenía que ir al psicólogo. Ahora lo digo y lo recomiendo porque ha sido una ayuda importante para mí, no sólo me ha hecho sentir mejor emocionalmente, también ha sido un apoyo para mejorar mis relaciones. Parte importante de mi proceso ha sido aprender a reconocerme y dejar de escaparme de lo que no quería sentir. Aún sigo aprendiendo, pero es increíble contar con una visión externa que me entienda y me haga ver las cosas desde otro lugar.